Hola, hoy bueno... Dejaré de hablar de mi entorno para que me conozcan.
Hoy quiero comentarles lo que siento en el alma.
Una ruptura, una separación, "Nunca mas", "Adiós" de esos que se dicen para siempre. De eso quiero hablarles.
Yo lo sabía, lo presentía, sabía que las cosas iban a pasar irremediablemente esa misma tarde de marzo. Apenas lo escuché de sus palabras extrañamente ninguna lagrima descendió pero nunca había sentido un dolor tan fuerte como ese, es más fuerte incluso que cualquier ruptura de hueso o dolor de muela, quizá de oído. Es el dolor del corazón, del alma. Lo pronunciaba a ritmo lento según mi cerebro podía ir asimilando esta información... No lo podía asimilar del todo, pero era real estaba a mi lado pronunciando cada palabra que con tanto dolor me vaciaba la vida, el futuro.
Fueron puñaladas acertadas, directo al corazón. Me quedé sin hablar, no tenía nada que decir. Bueno si, NECESITABA gritar , reclamar porque no estaba terminando después de tantas promesas, después del futuro planeado en nuestras mentes, donde quedaba Emma y Celeste, donde estaban nuestros planes, donde quedaron los momentos más maravillosos de nuestras vidas, DONDE QUEDARON LOS TE AMO?, pero no lo iba a decir porque en primera instancia mis cuerdas vocales no reaccionaban y segundo porque no quería que me viera desfallecer frente a él. Incluso de asombró que lo tomara tan tranquila, lo que el no sabía es que todo lo habitaba dentro de mi se había desmoronado. Me abrazó y con rabia le aparté, fue mi única reacción no era justo lo que estaba haciendo ni con él, ni con ella, ni conmigo. Pero lo vi tan seguro de su decisión que no podía interferir en ella. Me encomendó la tarea de vivir el sueño de los 2 por nuestro amor... Y claro que lo voy a vivir! Pero no porque me lo haya pedido sino porque es mi sueño y primero estoy yo y mi amor propio.
*Él sabe que siempre lo amaré y que nada de lo que haga lo podrá cambiar*
Tan pronto el tiempo que compartiamos terminó y caminé de una manera tan valiente y aparentemente tranquila que en realidad no podía comprender porque estaba manejando tanta cordura en un momento de descontrol, y en efecto tan pronto doblé la esquina me senté a llorar...
Por fortuna estaba cerca de mis conocidos y bueno no estaba sola.
Cuando me encontré finalmente "sola" no paré de vaciar el dolor que tenía en el alma, en cuanto puse los pies en el cemento sentí la necesidad de correr hasta donde mi cuerpo soportara y en menos de 2 minutos recorrí 20 cuadras, no sé como pasó... Solo veía las luces, los carros y las personas pasar a toda velocidad y mientras corría iba dejando atrás el recuerdo pero en cuanto paré me di cuenta que nada se estaba quedando atrás, lo que pasaba realmente era que estaba huyendo pero esa maldita historia me seguía y nunca me iba a deshacer de ella.
No pude conciliar el sueño tras varios intentos cuando finalmente lo logré, lo vi en un hospital con tan excelente compañía...
Cuando me levanté hoy las lagrimas no terminaban de fluir con tranquilidad, siento que hay algo atascado que no me permite llorarlo lo suficiente para volverme a levantar por completo... Intenté durante todo el día alejar mi mente ocupandola en otras cosas, aforutnadamente cuento con un trabajo que me obliga a mantener la mente ocupada. Lo logré la mayor parte del tiempo pero aunque la mente estuviera a tope constantemente sentía un vacío, un fuerte dolor en el estomago, en el corazón, en el alma.
Y ahora me encuentro aquí, intentando desahogar todo lo que realmente estoy sintiendo, a medida que escribo no logro sacar una lagrima pero las necesito fuera. No sé.
Pdt: Yo sabía que esto pronto iba a pasar y tenía razón, mi vida estaba a punto de cambiar.
Lila.